La central sindical definió la medida de fuerza tras una reunión en la que evaluaron incluir una movilización.
La Confederación General del Trabajo (CGT) decidió convocar a un paro general el 8 de abril. La medida se definió en el Consejo Directivo de la central, que se reunió este jueves y debatió sobre la posibilidad de acompañar el paro con una movilización al Congreso o a Plaza de Mayo. Dirigentes sindicales confirmaron que la fecha quedó establecida tras una deliberación interna.
El ala más combativa de la CGT impulsó esta medida tras las tensiones surgidas por los enfrentamientos entre manifestantes y la policía durante la marcha de jubilados de la semana pasada. Desde la organización señalaron que el paro buscó profundizar la protesta social contra las políticas económicas del gobierno de Javier Milei.
Héctor Daer, cosecretario general de la CGT, había anticipado el paro durante un acto celebrado en el Salón Felipe Vallese el viernes pasado. En ese evento, Daer afirmó que la huelga se realizaría antes del 10 de abril. El anuncio contó con el apoyo de figuras destacadas como Hugo Moyano, Andrés Rodríguez y José Luis Lingeri, quienes respaldaron entusiastamente la decisión.
El clima de tensión en la CGT escaló tras la reciente protesta frente al Congreso, donde hubo una fuerte represión y decenas de heridos. La convocatoria de huelga marcó la tercera medida de fuerza de alcance nacional desde que Javier Milei asumió la presidencia, siendo las anteriores en enero y mayo de 2024. Ambas paralizaron el transporte público y contaron con una fuerte adhesión.
La CGT también destacó su compromiso con los sectores más golpeados por la crisis económica y confirmó que buscaron coordinar acciones con organizaciones sociales como la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP). Esta alianza fortaleció el impacto de las medidas y reflejó la creciente unidad en las demandas sociales.